Ruta de naturaleza en la costa
Uno de los principales atractivos del municipio de l’Ametlla es el buen estado de conservación de los ecosistemas naturales, tanto terrestres como marinos. A la zona costanera y bajo el mar son notables los efectos de una de las comunidades vegetales más significativas del Mediterráneo.
Son las conocidas praderías de fanerógamas marinas, donde destaca la presencia en nombre de la Posidonia oceánica. Hábitats los cuales acogen una gran riqueza biológica, tanto de especies animales como vegetales. A la zona supralitoral, donde las condiciones ambientales son extremas para la vida, se pueden encontrar endemismos vegetales y otras especies de alta importancia ecológica.
1. La Zona Mareal (Ruta de Natura a la Costa)
La zona mareal es una zona de cambios y fluctuaciones, donde los organismos que viven tienen una gran capacidad de adaptación a estas variaciones. Las fluctuaciones mareales en la Mediterránea son muy escasas, con unos máximos de 50 cm y siempre debido a fenómenos estacionales atados a las variaciones de presiones atmosféricas. Así pues, las principales variaciones se dan en los meses de enero y febrero, en periodos de altas presiones, variaciones conocidas localmente como las “minves”. En esta zona se crean charcos temporales, con una elevada salinidad y muchas variaciones de nivel debido a la evaporación. Aún así, estos charcos acogen diferentes especies animales y vegetales. Diferentes especies de góbidos y blénnidos, anemonas, y crustáceos hacen de estos charcos su hábitat.
2. Las Aves de Mar (Ruta de Natura a la Costa)
La actividad pesquera ha cruzado fuertes ataduras con muchas especies de pájaros marinos. Muchas son las especies que durante las diferentes épocas del año se alimentan de los restos dejados por las embarcaciones de pesca, sobre todo las de arrastre. Así, tanto en la época estival con la reproducción, como en la época invernal, en el litoral de l’Ametlla se pueden observar diferentes especies de pájaros marinos. Muchas de ellas difíciles de observar ya que raramente se acercan a tierra, salvo en el momento en que las embarcaciones de pesca se refugian para seleccionar el pescado antes de entrar al puerto.
3. Vegetación y fauna (Ruta de la Natura costa)
En estos medios litorales aparece la vegetación halófila, en suelos ricos en sales, de carácter arcilloso o de arenas. En los márgenes de las lagunas encontramos formaciones helofíticas con raíces permanente o temporalmente sumergidas. Encontramos comunidades de caña, formadas básicamente por caña (Phagmites australis) y la espadaña (Typha angustifolia), sustituida en algunos sitios más salobres por el carrizal con junco marítimo. Alejándonos del agua encontraremos otras comunidades según el sustrato y la salinidad, como la comunidad de juncos con plantaje cracifolio, en terrenos arenosos con limos que retienen el agua; la comunidad de limonium y tomillo blanco (Artemisia gálica); y la comunidad de salicornias herbáceas y subarbustivos. Estos ambientes lacustres litorales acogen una gran variedad de especies faunísticas. Durante las épocas de migración estos espacios utilizados por diferentes especies de avifauna como zona de descanso y alimentación, a la vez es un hábitat idóneo para aquellas especies de aves que se quieran reproducir, como es el caso de la polla de agua (Gallinula chloropus). Destaca, por su estado de conservación, la presencia en estos ambientes de dos especies de peces los cuales en estos ambientes encuentran el refugio idóneo para su subsistencia. Se trata del Fartet (Aphanius Iberus ) y el Samaruc (Valencia hispanica), las cuales se encuentran en la lista de especies en peligro de extinción, debido a la desaparición y modificación de sus hábitats y a la introducción de especies foráneas. También son un refugio idóneo para diferentes especies de anfibios, reptiles y mamíferos, como la serpiente de collar (Natrix natrix) o el gripau comú (Bufo bufo) o la musaraña (Crocidura russula) y naturalmente de un número elevado de especies de insectos en cualquiera de sus estadios.
4. Las Lagunas (Ruta de la Natura costa)
El término municipal de l’Ametlla de Mar es una extensa planicie sedimentaria, la cual se ve desdibujada por la presencia de las ramblas y barrancos mediterráneos, que a su paso han ido excavando los cauces que conducirán el agua hasta el mar, formando al final de su curso pequeños deltas en forma de playa. A causa del proceso erosivo, los grandes barrancos excavan por debajo del nivel freático provocando un afloramiento de agua subterránea. Especialmente en las zonas más próximas al mar, justo en el punto de contacto con la falca salina. En estos puntos es donde se crean las lagunas costeras de rambla que son, seguramente, el valor natural más destacado del litoral terrestre de l’Ametlla de Mar.
5. Acantilados costeros ( Ruta de la Natura costa)
Los acantilados costeros de l’Ametlla, aunque no tienen demasiada altura, sí son predominantes en el litoral de l’Ametlla de Mar y es un substrato caracterizado por el desarrollo de comunidades halófitas de pedriscos litorales, adaptados a ambientes rupícolas con suelos delgados o inexistentes, insolación elevada y una gran influencia salina. Aun así, estas comunidades también pueden aparecer en ambientes arenosos y arcillosos de entrantes de mar. Estas plantas halófilas se mezclan con otras de comunidades adyacentes a medida que nos alejamos de la línea de costa. Por ello, esta comunidad se encuentra muy repartida por el litoral del espacio, pero relegada a una estrecha franja de entre 2 a 10 metros de anchura. La comunidad que domina este ambientes la comunidad de Limoniums e hinojo de mar y las especies más destacadas son el hinojo de mar (Crithmum maritimum) y diferentes especies del género Limonium de las cuales algunas de ellas son endémicas de esta zona del litoral catalán como el Limonium giberti o el Limonium vigoi.
6. Vegetación supralitoral (Ruta de la Natura costa)
Una costa rocosa, unas condiciones ambientales extremas, no son un impedimento para que la vegetación no pueda poblar esta zona de la costa. Algunas especies tienen la capacidad de colonizar este espacio gracias a sus características adaptativas. Frecuentemente las especies que podemos encontrar son plantas de hojas y tallos leñosos y delgados, con la capacidad de excretar sal por las glándulas especializadas. Destaca la presencia del hinojo marino Crithmum maritimum y de diferentes especies del género Limonium entre los que destaca la especie Limonium Vigoi, endemismo del litoral tarraconense con un núcleo poblacional donde se concentra el 99% de los efectivos de la especie. Otra de las especies que se encuentra es el Llantén marino, Plantago crassifolia. También destaca la presencia de pinedas de pino blanco Pinus halepensis, la comunidad de maquia y la de calcícolas. En el caso del pino blanco destacan las estrategias que adaptan algunos pies próximos a la orilla del mar, debido a las condiciones ambientales causadas por la salinidad y el viento.
